(by ella)
O la odias o la amas. Nunca he escuchado a nadie hablar de la coliflor en un tono comedido, siempre desata emociones de extremo. Será por eso que me gusta tanto?
La semana pasada, ya día otoñal, me apetecía una coliflor de lo mas traicional; con sus patatas, huevo y sin olvidarnos de una ajada en todo su esplendor.
Como siempre dice el, cuando digo: » Voy a hacer un poquito de……», se puede venir a comer todo el vecindario, así que como era sabido me sobró una fuente. Para no repetir el mismo plato recordé como las hacía mi abuela Carmen y me puse manos a la obra con los Buñuelos de Coliflor saboreando la niñez.
Para los ingredientes he utilizado:
- 300-400 gr de coliflor cocida
- 2 huevos
- 3-4 cucharadas de harina
- 2-3 cucharadas de leche
- Pimienta
- Sal
- Aceite
- Perejil
- Vinagre
Y nos ponemos manos a la obra.
Separamos las claras que llevaremos a punto de nieve con tres gotitas de vinagre, una vez que las tengamos en su punto añadimos las yemas batidas y ligamos.
Añadimos la leche y harina integrandolos bien para evitar grumos.
Cogemos la coliflor cocida y con ayuda de un tenedor la mezclamos con el resto de ingredientes.
Salamos y añadimos pimienta y perejil picado.
En una sartén con aceite de oliva muy caliente echamos montoncitos de la preparación. Doramos por los dos lados.
Los vamos sacando de la sartén e incorporando a un plato con papel absorvente para quitar el exceso de aceite.
Con las patatas sobrantes las podemos cortar y pasar por la sarten con un nada de mantequilla.
Y ya estamos listos para ir a la mesa;)